Fui a un jardín infantil para supervisar a mis estudiantes de asistente en párvulos y conversé con la directora del centro. Ella es muy católica y siempre me habla de lo importante que es Dios para su vida. Esta vez me sorprendió su conversación, pues comenzamos a hablar de lo importante que es aferrarse a Jehová, en ese momento comenzó a relatarme una experiencia que tuvo cuando ella estaba rezando el "Padre nuestro", Dios le habló. Yo la miré incrédula y con muchísimos prejuicios, sin embargo quise saber lo que Él le había dicho. La directora continuó diciendo: "... cuando dije venga a nosotros Tu reino, hágase Tu voluntad en el cielo como en la tierra... Dios me preguntó: ¿En qué tierra? Entonces dije: aquí en la tierra, que Tu voluntad eterna del cielo sea copiada aquí en la tierra." Yo la seguía mirando y pensando que yo hubiese respondido algo similar. La directora siguió diciendo: Entonces Dios me preguntó ¿De dónde Te forme? ¿No recuerdas que te forme del polvo y que al polvo volverás?... Entonces comprendí que cuando le pido que haga Su voluntad en el cielo como en la tierra, le estoy diciendo que lo que hay en el cielo lo copie en mí... y desde ese momento cada vez que rezo el Padre Nuestro ya no es lo mismo, pues tiene significado para mí."
Una vez que terminó de relatarme lo sucedido, me quedé sin palabras pues yo nunca había comprendido así esa parte del Padre nuestro... fue un rhema para mí. Y aprendí una valiosa lección, Dios siempre va a usar a aquellos vasos que estén dispuesto a escucharles, sin importar nuestra raza, educación, otros.
Una vez más Dios me sorprendió...
Papá gracias por estar enseñándome a callar para poder escuchar Tu voz. I Love you forever.
